El presidente comunal Leonardo Tempesta dijo que por la cantidad de gente que había en la reunión que «haya un solo fallecido es una suerte».

El presidente comunal de Pueblo Andino, Leonardo Tempesta, aseguró este lunes que el ataque sicario que culminó con el asesinato de Gonzalo Daniel Barrientos, de 24 años, con vinculaciones con la banda narco Los Monos, podría haber tenido consecuencias aún más graves teniendo en cuenta las dimensiones de la casa quinta donde se registró la balacera y la gran cantidad de gente que había en la fiesta.

«La gente está conmocionada porque no son hechos a los que un pueblito como el nuestro esté acostumbrado, no vamos a decir que no existe el delito acá, existe obviamente, pero es de otras características», dijo Tempesta en declaraciones al programa «El primero de la mañana» que se emite por LT8, sobre el homicidio del uno de los integrantes de la banda que lidera «Lucho», el hijo de asesinado líder de Los Monos Claudio «Pajaro» Cantero .

«Recordemos que Pueblo Andino está ubicado 30 kilómetros al norte de Rosario por la autopista que va a Santa Fe, tiene la característica de que es muy parecido a Pueblo Esther, muchas casas de fin de semana, de lunes a viernes somos un pueblo de 7 mil habitantes y los fines de semana, durante la temporada de verano podemos llegar de 15 a 20 mil», explicó el funcionario comunal, y advirtió: «Se dan estas cuestiones, casas quina que muchas son disfrutadas por sus propietarios y otros han visto, ante la demanda, que pueden alquilarlas, algunos para familias que vienen por el fin de semana y otros para fiestas, que es el caso este».

Tempesta contó que «gene de Rosario alquiló una casa para hacer una fiesta, sin el conocimiento de la comuna, nosotros tenemos una legislación del alquiler de casas quinta y que contempla el caso de que se haga una fiesta porque conlleva el riesgo de ruidos molestos y eso fue lo que ocurrió».

«A las 7 de la tarde, nosotros tenemos una pequeña Guardia Urbana, con muchas limitaciones, que acudió a un llamado de los vecinos porque la música estaba fuerte en el lugar y detecta que ya había un gran número de personas y les piden que bajen la música, les recuerdan que hay una ordenanza vigente», continuó con su relato, y agregó: «Con un espíritu medio sobrador accedieron, pero después siguió la fiesta y terminó de eta manera, a la madrugada…»

No obstante, descartó de plano que el incidente con los agentes de la comuna este vinculado con el ataque que terminó con la vida de Barrientos y contó: «Cuando llegó la policía al lugar se había producido un desbande de los 50 invitados a la fiesta, quedaban 5, algunos había llevado los heridos a nosocomios de la región, San Lorenzo y Granadero Baigorria y el resto se había ido».

«Para que se den una idea de la dimensión de la situación, la casa que habían alquilado está en un terrenito de 12 metros de frente por 38 de fondo, con una pileta y una construcción que no supera los 60 metros cuadrados y en ése ámbito, según el informe policial, encontraron más de 20 vainas servidas», señaló.