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El establecimiento educativo contará con 9 aulas, gimnasio semicubierto, vestuarios y sector de huerta. El plazo de ejecución es de 240 días y la inversión supera los $ 530 millones.
El Ministerio de Infraestructura, Servicios Públicos y Hábitat llevará adelante el miércoles 11 de enero el acto de apertura de ofertas para construir una nueva escuela primaria pospandemia en la ciudad de Rosario, que estará emplazada en Benito Álvarez entre Joaquín Suárez y Matheu, en el barrio Nuevo Alberdi. La obra cuenta con un presupuesto oficial de 530 millones de pesos y un plazo de 240 días.
En el marco de los anuncios de obras para Rosario y zona recientemente realizados por el gobernador Omar Perotti, cuya inversión alcanza los 50.000 millones de pesos, la ministra de Infraestructura, Silvina Frana expresó: “Desde el primer día de la gestión, el gobernador nos pidió escuchar a la gente y proyectar las obras que mejoren su calidad de vida».
Al respecto, Frana agregó que «la construcción de esta escuela se da como resultado de este diálogo, en el marco del Plan Incluir, como respuesta a una de las principales necesidades de este populoso barrio. Diálogo que se construyó con los vecinos, la comunidad educativa y el Arzobispado de Rosario -que cedió el terreno-, en un trabajo conjunto que nos dimos con el Ministerio de Educación, para que todos los chicos estén en la escuela, pero en una escuela que reformula los espacios educativos para el siglo XXI, para que los espacios de aprendizaje acompañen las nuevas metodologías pedagógicas”.
Asimismo, la ministra recordó que el gobernador adjudicó la obra de la escuela secundaria Nº 392 “Juramento a la Bandera” a la unión transitoria de empresas conformada por PECAM S.A. – EPRECO S.R.L., por la suma de $1664.853.347,26, cuyo plazo de ejecución será de 240 días. “La infraestructura escolar es un faro de esta gestión, porque en lo que llevamos de gobierno de Omar Perotti, ya se han invertido más de $ 20.000 millones para construir, ampliar y refaccionar escuelas y jardines”.
Por su parte, la secretaria de Arquitectura y Obras Públicas, Leticia Battaglia, explicó que el proyecto se desarrolla en planta baja, con un total de nueve aulas para niños de 1° a 7° grado, un polideportivo semicubierto con área de vestuario y un sector de huerta intermedio.
El prototipo escolar pospandemia tendrá cuatro principios básicos: uso extensivo e intensivo del edificio, flexibilidad funcional, ambientes saludables y construcción eficiente. Todos los espacios de aprendizaje se caracterizan por la flexibilidad espacial, ya que podrán integrarse o segregarse según las necesidades pedagógicas.
“Como vecina y rosarina estoy feliz con esta obra”, dijo Bttaglia, quien comentó que “en la provincia ya hemos avanzado con 14 nuevos jardines en ejecución y 6 escuelas primarias y secundarias diseñadas con estos criterios”.
Y añadió: “Hablamos de que, por primera vez, las escuelas públicas van a tener agua caliente en los baños y lo haremos con calefones solares. Habrá televisores de 50 pulgadas en todas las aulas, pantallas digitales en todo el mobiliario, cámaras de seguridad, sistemas de alarmas. Además, este proyecto contempla que los sectores áulicos, administrativos y comunes están divididos, y de esta manera, los fines de semana o los días feriados la comunidad barrial puede hacer uso de las instalaciones educativas, por ejemplo, gimnasio, patios y playones deportivos”, concluyó.
LA OBRA
El acceso al colegio se produce a través de un espacio cedido a la comunidad en forma de plaza pública, incorporando a dicha intervención la regularización de las veredas perimetrales y rampas de discapacitados.
El SUM tiene un rol protagónico frente al ingreso, con un frente totalmente abierto al hall central, y con la posibilidad de uso a la comunidad, de manera independiente al funcionamiento de la escuela. Todos los recorridos son accesibles y sin barreras arquitectónicas.
ENERGÍA
Se destaca el posicionamiento frente al consumo energético, desde dos aspectos: el primero minimizar al máximo el consumo de recursos, en especial del agua y de energía; y el segundo, aprovechar los recursos naturales y energía renovable.
Todos los elementos del proyecto que consumen energía que se utilizan en el proyecto son de alta eficiencia y mínimo consumo. Se instalarán en la cubierta del edificio paneles solares fotovoltaicos que aportarán gran parte de la energía eléctrica necesaria para el funcionamiento de la escuela y además, inyectarán energía a la red cuando haya excedente.
La climatización de las aulas se resuelve a través de piso radiante, que es el sistema de mayor eficiencia y confort. La energía para el sistema será la proveniente de colectores solares de placa plana, ubicados en la cubierta del edificio, y que contarán como equipos auxiliares, con calderas de condensación por su alta eficiencia. Se considera que el aporte solar podrá superar el 50% de la energía necesaria.
Asimismo, a través del proyecto se garantiza la iluminación natural, ventilación natural cruzada y un sistema de ventilación forzada que asegura las condiciones óptimas requeridas de acuerdo a la ocupación de los locales.