La fábrica bajó de mil a unos 600 empleados en menos de dos años. Además, desde junio, suspendió una semana al mes la producción.

Nuevas desvinculaciones en General Motors. En esta oportunidad, 90 trabajadores fueron cesanteados a través de retiros voluntarios.

La fábrica ubicada en Alvear, a 14 kilómetros de Rosario, de esta manera redujo un 40% su plantel en menos de dos años, ya que pasó de 1000 a unas 600 personas.

La reducción de personal se da, entre otros factores, a raíz de la descontinuación de la producción del modelo Cruze a fines de 2023, para dejar solo la Tracker, lo que generó una fuerte disminución en el volumen de requerimiento de piezas a los proveedores locales.

Suspensiones

La firma viene sufriendo distintas medidas para paliar la complicada situación económica. En mayo de este año decidió suspender la producción de autos de su planta en Alvear durante todo el mes de junio y una semana por mes hasta diciembre.

En esa oportunidad, “General Motors informa que, con el objetivo de adecuar su planificación regional de producción, instrumentará una suspensión de una semana por mes en la planta de Alvear, a partir de julio y hasta diciembre de 2025”, explicó la firma automotriz en un comunicado.

Además, señaló que “esta medida se basa en la dinámica de las exportaciones en el actual escenario sudamericano y no afectará el abastecimiento de vehículos al mercado argentino, ni las inversiones para realizar las actualizaciones necesarias en la planta para fabricar la nueva generación de Tracker”.